sábado, febrero 16, 2008

La traicion de la "Ansiosa Mente"

Un alumno que quería aprender esoterismo de un gran maestro insistía mucho para que lo recibiere.

- ¡Maestro enseñame!

- No, no lo haré.

- Maestro es deber enseñar al que lo desea de corazón!...

- No no lo haré, no insistas!....

Un día cualquiera el maestro deambulaba por la ribera de un hermoso arroyo y apareció el alumno, y le dijo:

- Creo que es el momento de que me enseñes Maestro...

Y el maestro le dijo:

- Ven acercate conmigo al borde de este arroyo...

Y efectivamente este lo hizo y el maestro tomándolo de la cabeza lo sumergió en el agua un tiempo prudencial. Cuando el alumno sentía que se ahogaba comenzó a rasguñar los brazos del maestro, y cuando este lo hubo sacado le preguntó:

- Que pensaste cuando te estabas ahogando?, acaso pensaste en tu familia?

Y el alumno después de haber tomado aliento respondió:

- ¡NO!

- ¿En tus amigos?

- No-

- ¿Entonces que era lo que pensabas o necesitabas?

- Tenía hambre de Aire, Oxígeno.

- Ah!. Entonces cuando tengas esa misma hambre por aprender ese día te enseñare...

Autor Anonimo


Cuando la ansiedad supera a la necesidad, la derrota es augurable. Cuando nos consume la impaciencia y la insomne necesidad sobrepasa al concepto del proceso, entonces somos pasto de las circunstancias.

Requerir lo precisado con necesidad de corazon, con la mente abierta y la conciencia de la inminencia del exito basado en el camino y no en el destino, es la puerta que se debe cruzar para someter el alma al cotidiano y obligatorio proceso de aprendizaje, sin el cual seremos piedra entre las piedras y no seres en evolucion y caminando a la Luz constante y llamante, que simplemente esta alli esperando nuestro paso a paso.

La premura no siempre significa eficacia. El "despacio que estoy apurado" es Ley Universal de Aprendizaje.

Caminando es como se llega. No hay atajos en el camino a la Luz.

(...perdon si molesto...)

Hoy es un gran dia...

Esta mañana desperté emocionado
con todas las cosas que tengo que hacer
antes de que el reloj marque la medianoche.

Tengo responsabilidades que cumplir hoy.
Soy importante.
Mi trabajo es escoger
qué clase de día voy a tener.

Hoy puedo quejarme
porque el día esta lluvioso,
o puedo dar gracias a Dios
porque las plantas están
siendo regadas gratis.

Hoy me puedo sentir triste
porque no tengo más dinero,
o puedo estar contento
de que mis finanzas me empujan
a planear mis compras con inteligencia.

Hoy puedo quejarme de mi salud,
o puedo regocijarme de que estoy vivo.

Hoy puedo lamentarme
de todo lo que mis padres no me dieron
mientras estaba creciendo,
o puedo sentirme agradecido
de que me permitieran haber nacido.

Hoy puedo llorar
porque las rosas tienen espinas,
o puedo celebrar
que las espinas tienen rosas.

Hoy puedo auto compadecerme
por no tener muchos amigos,
o puedo emocionarme y embarcarme
en la aventura de descubrir nuevas relaciones.

Hoy puedo quejarme
porque tengo que ir a trabajar,
o puedo gritar de alegría
porque tengo un trabajo.

Hoy puedo quejarme
porque tengo que ir a la escuela,
o puedo abrir mi mente enérgicamente
y llenarla con nuevos y ricos conocimientos.

Hoy puedo murmurar amargamente
porque tengo que hacer
las labores del hogar,
o puedo sentirme honrado
porque tengo un techo
para mi mente, cuerpo y alma.

Hoy el día se presenta ante mí,
esperando a que yo
le dé forma y aquí estoy,
el escultor que tiene que darle forma.

Lo que suceda hoy
depende de mí,
yo debo escoger
qué tipo de día voy a tener.

Ten un gran día...
A menos que tengas otros planes.

Autor Anonimo

Hoy es el dia mas importante del resto de mi vida. Porque es hoy. Asi de sencillo. Hoy es hoy, ayer ya paso, mañana aun no existe. Hoy elijo que puertas cruzar, que porcion de la matriz explorar, que cualidad explotar, que pedazo de mi alma cultivar y que parcela de mi corazon repartir.

Hoy decido si empiezo con una sonrisa el dia, si la oracion es para Dios o la Virgen, si mi camisa es blanca o azul, si me pongo zapatos o mocasines, si escucho en el auto baladas o blues.

Hoy es mi dia. Decido si almuerzo papas o verduras, si duermo siesta o navego, si escribo o leo, si veo television o salgo a caminar.

Hoy el dia es todo mio. Es el gran dia de mi vida. El ayer tambien lo fue pero ya fue. El mañana lo sera pero aun no esta.

Hoy tengo una gran mision: VIVIR...

(...perdon si molesto...)

El paracaidas

Charles Plumb era piloto de un bombardero en la guerra de Vietnan. Después de muchas misiones de combate , su avión fué derribado por un misil.
Plumb se lanzó en paracaídas , fué capturado y pasó seis años en una prisión norvietnamita . A su regreso a Estados Unidos , daba conferencias relatando su odisea , y lo que aprendió en la prisión.
Un día estaba en un restaurante y un hombre lo saludó :"Hola usted es Charles Plumb , era piloto en Vietnam y lo derribaron , verdad?".

"Y usted como sabe eso?", le preguntó plumb.

"Porque yo empacaba su paracaídas. Parece que le funcionó bien, verdad?."

Plumb casi se ahoga de sorpresa y gratitud . "Claro que funcionó bien, si no hubiera funcionado , hoy no estaría aquí".

Plumb no pudo dormir esa noche , preguntándose :"Cuántas veces lo ví en el portaviones y no le dije ni buenos días , porque yo era un arrogante piloto y él era un humilde marinero?".
Pensó también en las horas que ese marinero pasaba en las entrañas del barco enrrollando los hilos de seda de cada paracaídas , teniendo en sus manos la vida de alguien que no conocía.
Ahora Plumb comienza sus conferencias preguntándole a la audiencia:"¿Quién empacó hoy tu paracaídas ?"

Autor desconocido
Todos tenemos a alguien cuyo trabajo es importante para que nosotros podamos salir adelante.
Uno necesita muchos paracaídas en el día :Uno físico , uno emocional, uno mental y hasta uno espiritual.

A veces en los desafíos que la vida nos lanza a diario , perdemos de vista lo que es verdaderamente importante y las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se lo pidamos.

Dejamos de saludar , de dar las gracias , de felicitar a alguien o aunque sea decir algo amable , sólo porque sí.

Hoy , esta semana , este ño . cada día , trata de darte cuenta quién empaca tu paracaídas , y agradécelo.

Todos necesitamos de todos y aunque a veces se nos dificulte expresar afecto , demuestra tu agradecimiento con una llamada , una sonrisa , con un gracias ó con un te quiero ó con un...... te amo...

Gracias por empacar hoy, justo hoy y en este dia, mi paracaidas...

(...perdon si molesto...)

No veo a Dios

Cierto día, el Cardenal Weisman discutía con un inglés utilitarista sobre la existencia de Dios. A los argumentos del gran sabio, respondía el inglés con mucha flema:
"No lo veo, no lo veo".
Entonces, el Cardenal tuvo un rasgo ingenioso. Escribió en un papel la palabra "Dios", y colocó sobre ella una moneda:
-- "¿Qué ves?" -le preguntó.
-- "Una moneda" -respondió el inglés.
-- "¿Nada más?" -insistió el Cardenal.
Muy tranquilo, el Cardenal quitó la moneda, y preguntó:
-- "Y ahora, ¿qué ves?".
-- "Veo a Dios" -respondió el inglés.
-- "¿Y qué es lo que te impedía ver a Dios?" -le preguntó de nuevo el Cardenal. Y el inglés se calló como un muerto

Del Foro Agora Mandragora
Donde esta Dios? Detras de nuestros mas obscuros anhelos... siempre...

Detras de donde lo pongamos... siempre...

Escondido en rincones a los que lo relegamos... siempre...

Pero ESTA ALLI... siempre...

(...perdon si molesto...)

Zanahorias, huevos y cafe

Una hija se quejaba con su padre acerca de su vida y cómo las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.

Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra. La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre.

A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un tazón. Sacó los huevos y los colocó en otro plato. Finalmente, coló el café y lo puso en un tercer recipiente. Mirando a su hija le dijo: "Querida, ¿qué ves?"

-"Zanahorias, huevos y café" fue su respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.

Humildemente la hija preguntó: "¿Qué significa esto, padre?"

El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua fuerte, dura; pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer.

El huevo había llegado al agua frágil, su cáscara fina protegía su interior líquido; pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido.

Los granos de café sin embargo eran únicos; después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.

- "¿Cual eres tú?", le preguntó a su hija. - "Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido? ¿O eres como un grano de café? El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor tú reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor mejoren..."


Extraido de www.actos de amor.com

Como somos nosotros?

Cada uno puede ser cafe, zanahorias o huevos en situaciones diferentes de la vida, pero tambien podemos ser una sola de ellas todo el tiempo... y he ahi el problema...

Cuando derramamos lo esencial, lo fundamental, lo importante y trascendente en el entorno, somos los catalizadores del cambio del mismo, somos los que, aun fundiendonos, damos pureza y sabor al trascendente alrededor, al ambiente que nos rodea, le damos el aroma unico de cada mañana, de cada despertar, la quintaesencia del estimulo en el torrente sanguineo, el acelerador cardiaco para enaltecer lo que nos rodea, manteniendonos despiertos ante adversidades, uniendo en charlas interminables a amigos o conocidos en torno a nosotros, calentando frios corazones, combinandonos con la leche del vigor para un nutritivo desayuno o una reparadora merienda en el inicio o las pausas de la vida...

Indudablemente, destruirnos en apariencia ante la adversidad, es integrarnos al entorno, hacerlo nuestro y llevar las riendas de su destino convirtiendo el insipido liquido en la infusion reparadora que permite llegar, invariablemente, al final del camino...

(...perdon si molesto...)

El Verdadero Maestro

Había dejado atrás su juventud buscando afanosamente en disciplinas y filosofías tan dispares como el zen, budismo, sintoísmo, islam, cristianismo, judaísmo, la practica del yoga y la meditación, aquellas respuestas que su espíritu inquieto necesitaba tan imperiosamente. Podía decirse de él que ya lo había probado todo. De ninguna de sus tentativas logró el resultado esperado, más bien al contrarío; cada vez era mayor su confusión y frustración. Hasta que un día, resignado ya, decidió rendirse y renunciar a toda búsqueda.

Abatido por lo que él sentía como el abrumador peso de la derrota, fue dando tumbos, sin ocupación ni meta.


Más, un día, alcanzó a oír lo que un grupo de jóvenes con el entusiasmo propio de su juventud comentaban:

-Pues si, dicen de él que es no solo un gran maestro, sino que, además es el mejor, el más sublime, el primero, el más grande...

-Si, -añadió otro- tanto es así que aseguran algunos que con su sola presencia han alcanzado el conocimiento, la iluminación...

-Es cierto -comentó otro- pero seguro que debe ser poco menos que inaccesible. Además vive en un país tan remoto.

Estos comentarios fueron suficientes para reavivar en él la llama de aquella inquietud que tantos años había permanecido dormida.... Y pensó:

- Aún que tal vez fuera cierto que fuera casi inaccesible y que además viviera en aquel lejano país del que alcanzó a oír su nombre... ¿Que podía perder él que ya lo había perdido todo, hasta la esperanza?

Por eso y con la firme determinación de su ilusión renovada emprendió el camino hacia aquel distante país. Después de mucho tiempo y esfuerzo y penalidades que no hacían sino provocar más empeño logró llegar a aquél país. Pero nadie parecía conocer ni saber de aquél gran maestro, a pesar de su fama de ser el mejor, el más grande, el primero...

Nuevamente el desánimo le incitaba ya a una nueva renuncia pues, pasaba el tiempo y ante su desesperación no conseguía que nadie le diera referencia alguna. Hasta que un día, en una de las últimas ciudades que le quedaban por visitar se encontró con un grupo de jóvenes que animadamente iban comentando sobre una fiesta a la que estaban invitados.

Tal vez, y recordando que fueron unos jóvenes también los que con sus comentarios le decidieron a emprender la hasta entonces infructuosa búsqueda, o quizá por una compulsiva intuición se dirigió a ellos preguntándoles por aquel gran maestro, el más sublime, el mejor, sin duda el primero.

Casi no podía creerlo cuando uno de ellos pregunto a su vez a un compañero:

-¿No recuerdas que hace mucho tiempo también vino uno preguntando por ese supuesto maestro?

-Si, y creo que se refiere a Kabir... he oído rumores al respecto.

-Pues si es a él al que buscas -añadió un tercero- estás de suerte pues vamos a una fiesta a la que sabemos que él también está invitado. Si quieres acompáñanos y te lo mostraremos.

-
¿Como? ¿A una fiesta? -pensó- ¿Como puede ser esto... un gran maestro en una fiesta? Seguro que hay un mal entendido... Pero gracias a que yo he hecho yoga, zen, conozco el budismo, el sintoísmo... lo veo bien claro ¿como va a ir a una fiesta un maestro? Pero, ya que he llegado hasta aquí, veamos quien es este tal Kabir.

Cuando llegaron a la lujosa mansión en la que se celebraba la fiesta se encontró con lo que a sus ojos le pareció poco menos que una orgía palaciega. Ahora si que ya no tenía ninguna duda de que allí no encontraría maestro alguno... porque, el que había hecho zen, yoga, sufismo, etc, etc... ¿como podía caer en semejante error? Por cierto, ¿donde estaba el tal Kabir?

Cuando preguntó por él uno de los jóvenes se disculpó:

- ¡Ah! si, perdona, ...espera a ver... ¡Si! ¿Ves aquel joven que está apoyado en aquella columna?... Si, aquella junto a la ventana...

-¿Como? ¿Aquel que está besándose con aquella chica?

Pero ¿como podía alguien creer que el tal Kabir fuera un maestro? Afortunadamente, él que había hecho zen, yoga, meditado, etc, etc... tenía sus ideas bien claras respecto a lo que debía ser un maestro. Y por supuesto, el tal Kabir, ...¿en una fiesta de una lujosa mansión y besándose con aquella mujer? ¡Ni por aproximación! Era evidente que aquellos jóvenes no comprendían el significado dela palabra “maestro” y que no habían comprendido, por lo que nuevamente preguntó tratando de ser más preciso:

- A ver, ¿no sabríais de alguien que... no sé,... que se haya ido a vivir retirado, que haya dejado todo...?

- Bueno, -interrumpió uno de ellos- ahora que lo dices... recuerdo que mi padre una vez me comentó que siendo aún joven, un amigo suyo se había ido a vivir solo en lo más alto de aquella montaña... Si, aquella que se ve al fondo, por esta ventana. Parece ser que era medio místico o algo parecido...

- ¡Al fin! -exclamó- ¡Este es el que busco!

Y con una apresurada despedida inició la marcha hacia aquella montaña. Después de una difícil y fatigosa ascensión alcanzó la cumbre y, súbitamente se encontró frente a la presencia de un anciano que, mayestáticamente sentado en una perfecta posición del loto ante la entrada de una pequeña gruta, estaba sumido en profunda meditación. Con una profunda sensación de sobrecogimiento, respetuosamente se sentó procurando no perturbarle, en actitud de reverente espera a pesar de su impaciencia que, iba en aumento a medida que transcurría el tiempo...

Pero, al fin, aquel anciano al que mil surcos en su rostro y una larga y blanca barba le conferían un aspecto solemne y venerable, lentamente abrió los ojos. No pudiendo contener más su impaciencia, empezó a narrarle al anciano las incidencias de su larga búsqueda. De como gracias a que él había practicado tantas disciplinas, estudiado diversas filosofías había podido adquirir los conocimientos precisos para comprender que si había algún gran maestro, el más grande, el primero sin duda era él ya que tanta era su plenitud que ello le permitía liberarse de la dependencia del mundo y sus miserias y grandezas...

Mientras se prodigaba en elogios a la maestría del anciano, este iba adquiriendo una expresión cada vez más triste y apesadumbrada, y cuando ya unas lágrimas se bifurcaban entre los infinitos y profundos surcos que el tiempo había cincelado en su rostro, con voz grave que reflejaba un gran pesar le interrumpió:

-
“No hijo, no soy yo el gran maestro, y ni mucho menos el más grande, el primero; sino que, el más grande, el más sabio, es este joven que viste en aquella fiesta. Si, porque yo aún debo apartarme la sociedad y del mundo, huir de él para tratar de encontar la paz en mi. En cambio este joven y gran maestro si puede estar en el mundo sin que el mundo esté en él, esta es la suprema maestría.”

Se cuenta que aquél inquieto buscador fue visto bajando de aquella montaña dando saltos y aspavientos y con grandes risotadas.

Algunos dicen que era la risa histérica y desenfrenada de aquel que ha perdido la razón...

Más, otros afirman que esta era la risa espontánea, desinhibida, arrolladora y visceral de aquél que por fin ha comprendido...


Antonio Coll


El Maestro no es aquel que lo aparenta sino aquel que lo vive. La Maestria no es sinonimo de seriedad sino de alegria, es prudencia pero enmarcada en feliz vivencia del presente no como un camino de penitencia sino como un sendero de conocimiento a traves de lo cotidiano, donde la interaccion con el entorno es posible gracias a la armonizacion del yo interno y a la inmunidad al desequilibrio respecto a los tiempos que se viven.

Un Maestro no siempre hace docencia. A veces omite enseñanza. Enseña a pescar y no da el pescado.

"Al que no sabe y no sabe que no sabe, enseñale
al que no sabe y sabe que no sabe, motivale
al que sabe y no sabe que sabe, reprendele
al que sabe y sabe que sabe, siguele... ese es un Maestro..."

(...perdon si molesto...)

Regalo de amor

Sally saltó de su asiento cuando vio salir al cirujano.

Le preguntó: "¿Cómo está mi pequeño?, ¿va a ponerse bien?,

¿cuándo lo podré ver?".

El cirujano dijo: "Lo siento; hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance".

Sally dijo, consternada: "¿Por qué a los niños les da cáncer?

¿Es que acaso Dios ya no se preocupa por ellos?

DIOS, ¿dónde estabas cuando mi hijo te necesitaba?".

El cirujano dijo: "Una de las enfermeras saldrá en un momento para dejarte pasar unos minutos con los restos de tu hijo antes de que sean llevados a la
Universidad".

Sally pidió a la enfermera que la acompañara mientras se despedía de su hijo. Recorrió con su mano su cabello rojizo.

La enfermera le preguntó si quería conservar uno de los rizos.

Sally asintió. La enfermera cortó el rizo, lo colocó en una bolsita de plástico y se la dio a Sally.

Sally dijo:

Fue idea de Jimmy donar su cuerpo a la Universidad para ser estudiado.

Dijo que podría ayudar a alguien más. Eso es lo que él deseaba.

Yo al principio me negué, pero él me dijo 'Mami, no lo usaré después de que muera, y tal vez ayudará a que un niñito disfrute de un día más junto a su mamá'.

Mi Jimmy tenía un corazón de oro, siempre pensaba en los demás y deseaba ayudarlos como pudiera".

Sally salió del Hospital Infantil por última vez, después de haber permanecido ahí la mayor parte de los últimos 6 meses. Colocó la maleta con las pertenencias de Jimmy en el asiento del auto, junto a ella.

Fue difícil manejar de regreso a casa, y más difícil aún entrar a una casa vacía. Llevó la maleta a la habitación de Jimmy y colocó los autos miniatura y todas sus demás cosas justo como él siempre las tenía. Se acostó en la cama y lloró hasta quedarse dormida, abrazando la pequeña almohada de Jimmy. Despertó cerca de la medianoche y junto a ella había una hoja de
papel doblada. Abrió la carta, que decía:

Querida Mami: Sé que vas a echarme de menos, pero no pienses que te he olvidado o he dejado de amarte sólo porque ya no estoy ahí para decirte

TE AMO.

Pensaré en ti cada día, mamita, y cada día te amaré aún más.

Algún día nos volveremos a ver. Si deseas adoptar a un niño para que no estés tan solita, podrá estar en mi habitación y podrá jugar con todas mis cosas.

Si decides que sea una niña, probablemente no le gustarán las mismas cosas que a los niños, y tendrás que comprarle muñecas y cosas de ésas. No te pongas triste cuando pienses en mí; este lugar es grandioso.

Los abuelos vinieron a recibirme cuando llegué y me han mostrado algo de acá, pero tomará algo de tiempo verlo todo.

Los ángeles son muy amistosos y me encanta verlos volar.

Jesús no se parece a todas las imágenes que vi de Él, pero supe que era El tan pronto y lo vi. ¡Jesús me llevó a ver a DIOS! ¿Y qué crees, mami?

Me senté en su regazo y le hablé como si yo fuera alguien importante.

Le dije a Dios que quería escribirte una carta para despedirme y todo eso, aunque sabía que no estaba permitido.

Dios me dio papel y Su pluma personal para escribirte esta carta. Creo que se llama Gabriel el ángel que te la dejará caer. Dios me dijo que te respondiera a lo que Le preguntaste: '¿Dónde estaba Él cuando yo lo necesitaba?'. Dios dijo:

'En el mismo lugar que cuando Jesús estaba en la cruz'.

Estaba justo ahí, como lo está con todos Sus hijos.

Esta noche estaré a la mesa con Jesús para la cena. Sé que la comida será fabulosa. Casi olvido decirte... Ya no tengo ningún dolor; el cáncer se ha ido.

Me alegra, pues ya no podía resistir tanto dolor y Dios no podía resistir verme sufrir de ese modo, así que envió al Ángel de la Misericordia para llevarme.

El Ángel me dijo que yo era una Entrega Especial!

Firmado con amor, de: Dios, Jesús y Yo

"La Carta de Jimmy"
Clasico de Internet.
Autor Desconocido.


Si supiera como va a ser la muerte, diria que es como se cuenta aqui. Al menos como espero que para mi sea...

La muerte es el principio y no el fin. Es el inicio del camino, no el final.

Morimos cuando vivimos y vivimos muriendo. Y cuando preguntamos "Donde esta Dios?" quizas hagamos el mismo cuestionamiento que, de seguro, a El le revuelve las Entrañas, al simular a su Hijo, al Maestro, cuando decia "Padre, por que me has abandonado..."

Dios no abandona. Dios es fanatico de los Beatles... porque siempre "Let it be"... lo deja ser...

(...perdon si molesto...)

Un regalo de mi Hermano Jorge Carvajal de Chile que no tiene desperdicio... "SANAR LA VIDA"

SANAR LAS CICATRICES.

Lo que hace un buen médico cuando alguien tiene una hemorragia severa, es obviamente ponerle sangre, pero no se queda transfundiendo sangre toda la vida; mientras transfunde la sangre cierra la herida. Si queremos sobrevivir en el plano emocional, además de transfundir energía, valor o ánimo es necesario cerrar las heridas y tratar esas cicatrices profundas y sensibles que aún no acaban de sanar.

Las relaciones humanas no se rompen, se desanudan. Cuando rompemos relaciones algo también se rompe dentro de nosotros: perdemos integridad adentro y afuera, pues nos quedamos con la herida del resentimiento que afecta permanentemente nuestra vitalidad. Si desanudamos con paciencia los lazos que nos une , esos lazos jamás se romperán aunque estemos muy lejos; nos llevaremos el regalo de la lección aprendida más que el sentimiento de fracaso que nos amarra al pasado.

Los resentimientos son cicatrices sensibles en tu corazón que generan úlceras, hipertensión, cáncer, colitis, artritis y muchas enfermedades crónicas. El nombre y apellido de muchas de las enfermedades que vemos en la práctica clínica es resentimiento, o sea, sentimientos no resueltos o mal reparados porque hubo una ruptura en la relación. No permitan jamás que una relación llegue al extremo de la ruptura que destruye y desintegra es red de soporte emocional que da sentido a la vida: de la integridad de esa red depende el pronóstico de la salud, la enfermedad y la vida. Si no tenemos una red de relaciones íntegra, nuestra susceptibilidad de enfermar o de morir es de 3 a 5 veces mayor , es lo que dicen todas las estadísticas.

Hay una definida relación entre la capacidad de curarse de una enfermedad grave y la calidad de relaciones que uno tiene condigo mismo y con otros. Dos estudios recientes sobre la evolución de algunas formas de cáncer- melanoma y cáncer de seno- demuestran cómo el reunirse periódicamente para compartir el dolor, la esperanza, la alegría, en un contexto de psicoterapia grupal de apoyo, puede duplicar la expectativa de vida y mejorar la calidad de la supervivencia.

Si a mí en medicina, alguien me dijera: mire descubrimos un medicamento que duplica la supervivencia de los pacientes con cáncer de mama metastático o con melanoma metastático, - que son muy malignos -, yo les diría: ese es un médicamente imperial, eso es una revolución en la medicina, ya estaríamos hablando por prensa, radio y televisión. Bien, ese medicamento existe y es el soporte afectivo

Suministramos esa poderosa medicina cuando restauramos el ritual de desarrollo. – aquí en el seminario taller se pasa alguien de primera fila y Jorge le extiende los brazos y se abrazan - empezamos el seminario dándonos un abrazo pero terminamos el seminario así, (la gira y colocándose detrás de ella la vuelve a abrazar colocando una de sus manos sobre la frente de ella), “yo te doy mi soporte, te puedes recostar en mi, en mi hombro, en mi corazón, me puedes sentir, puedes contar conmigo”.

Pero aunque no envuelvan a alguien en sus brazos, si ustedes le dicen desde su corazón -puedes contar conmigo, él ya se está soportando en ustedes, ustedes lo están amamantando con la esperanza, le están dando sentido a la vida, y el hilo para volver a tejer la integridad, que es un hilo de sentido. Podemos vivir de muchas maneras pero sin sentido es imposible vivir. Realmente por donde se nos reventó el hilo de la vida, en nuestra cultura es por el lado del sentido. El sentido no es verbal Se comunica con la mirada, desde el silencio, con la actitud, desde el acompañamiento, desde los actos, desde los hechos, desde la vida. “Por sus obras los conoceréis”; cuando con toda la vida decimos: “puedes contar conmigo”, estamos reconstituyendo el ritual de desarrollo.

Y el ritual de desarrollo es el punto de partida de la vida; es lo que más necesitamos cuando nacemos y también cuando nos estamos muriendo. No necesitamos muchas oraciones, ni muchas palabras sabias, necesitamos silencio, acompañamiento, ternura, disponibilidad, es todo lo que necesitamos. Necesitamos un hombro donde llorar, necesitamos en quien soportar nuestro dolor; necesitamos un colchón amortiguador, para que nuestras caídas no sean tan duras.


Cuando se hacen las grandes estadísticas poblacionales, como los del condado de Alameda en California, con estudios prospectivos a largo plazo con grupos de más de diez mil personas por ejemplo, y se demuestra que la gente puede fumar, puede beber, puede trasnochar, puede hacer muchas cosas pero lo único que no puede hacer : es romper sus relaciones, porque el riesgo de infarto, el riesgo de morir, el riesgo de enfermar de una enfermedad crónica, de aquel que no tiene soporte relacional, es mucho más grande que el riesgo de una persona que fuma o bebe pero está contento porque se siente querido. El sentirse querido es el principal alimento de la vida..

Ese sentirse amado por Dios en todas las cosas nos lleva a una forma de oración: Es orar como si aquello que pedimos ya nos hubiera sido concedido. Es el llamado “Efecto Isaías”, una esperanza que ya es viva confianza; es el sentirse querido por Dios; ya sea por Dios Padre, por el Dios que también vive en tu padre o en tu amada, en tu hijo o en tu terapeuta. No es posible de veras vivir sin la experiencia del amor: el sentirse amado es el alimento esencial de la vida.


Así que entramos en el mundo del soporte interior: un mundo de amor que va naciendo del ritual de desarrollo y se prolonga en la amistad, un amor incondicional desde el que se construye la libertad. Ese es el territorio del poder, que conquistamos cuando el guerrero convertido en bienhechor, ha descubierto, en la derrota de su ego, el sagrado misterio del dar para construir interior el templo sagrado del amor. En ese templo se restaura la integridad de un amor que no posee, que no reclama, que no depende nunca de nadie, porque sólo se soporta en el dar. Nacemos al gobernante que puede distribuir los bienes de su reino con la ayuda del mago, que aplica la magia distributiva de quien da a cada quien según su necesidad. Todo su dar es un don del amor, toda su ciencia conduce a la sabiduría del sabio que sabe que vivir es el arte de ocupar el propio lugar para ejercer el rol que a ese lugar corresponde. El gobernante se hace sabio y fluye en la alegría de esa levedad que asciende desde un soporte que sostiene sin amarrar. Y de nuevo ese soporte es de la esencia del amor incondicional de donde brota toda auténtica amistad. Por las puertas de la amistad entramos al corazón;,conmovidos desde el corazón, recorriendo el sendero del Guerrero y el Bienhechor, encontramos en la derrota del ego la conquista del reino interior.

La primera gran expansión de conciencia es el acceso al gobierno del cuerpo físico, el primer reino que conquistamos en el camino de regreso al Ser. Tomamos posesión de nuestro cuerpo, entramos con reverencia al templo interior, cuando lo conocemos. Cuántos mensajes cifrados del cuerpo que aún no comprendemos, ¿ cuántas enfermedades nacen de la ignorancia de las necesidades de nuestro instrumento? Una sinfonía de interacciones moleculares, atómicas, electrónicas, un concierto de fuerzas y energías, un paisaje estrellado de neuronas como un cielo interior en un cerebro que aún no hemos estrenado. Ese cuerpo es el patrón de organización de la energía y la información: es un espacio donde han quedado grabada las huellas del tiempo. El cuerpo es el cauce en el que se mueve una conciencia, que lleva el plan de la vida hasta la última de las células

El gobernante comprende que su cuerpo físico, el territorio de su reino, no es la esencia de su realidad: ese territorio externo es apenas el escenario de múltiples interacciones que expresan el nivel de la conciencia. Sobre la unidad física, el escenario, se reflejan siete notas fundamentales, o siete colores: cuatro colores sutiles, que se llaman los cuatro éteres y tres colores más densos que son, el sólido, el líquido y el gaseoso. Pero este cuerpo que vemos apenas es la sombra de ese doble que llamamos, el doble etérico.

Empezamos entonces a acceder a la sanación, al mundo del color, del sonido, al mundo de la circulación del prana; empezamos a leer los órganos en otro sentido; empezamos a ser conscientes de que nos nutrimos, no solamente de cosas materiales sino que también, por el polo neurosensorial, nos alimentamos del Sol, del aire, del prana del mar, del prana de la naturaleza; comprendemos que somos responsables del cuerpo de la tierra que también tiene un cuerpo etérico, en el seno del cual tenemos la vida y que si destruimos la tierra estamos destruyendo nuestra vida. Nacemos, desde el punto de vista energético, a otro tipo de ecología que aparece cuando hemos tomado posesión de nuestro instrumento y podemos ser maestros de nuestra energía.

Posteriormente llega el momento en que tomamos posesión de nuestra energía emocional: ese momento es sagrado, se le llama la Segunda Iniciación. Nacemos a nuestra humanidad cuando nacemos a nuestra energía y tomamos posesión del templo de nuestro cuerpo. Avanzamos en nuestro proceso de humanización cuando controlamos las emociones, cuando el jinete controla el caballo, cuando controlamos nuestros impulsos, cuando no somos sus víctimas sino que utilizamos la bestia, los impulsos, como el caballo alado, es decir: cuando lo tomamos como lo mejor de nuestra fuerza y le damos la dirección de nuestros pensamientos. Eso quiere decir cuando el sendero del científico y el sendero del místico se encuentran en nuestro quinto centro, es decir: el corazón asciende a la cabeza, la cabeza desciende al corazón y en el camino de encuentro entre los dos, surge la palabra creadora, la palabra iluminada, nace un creador porque es dueño de su magnetismo.

El hombre tiene un potencial magnético enorme, ese potencial magnético, emitido por su corazón puede trasformar la vida si tiene amor con discernimiento.

El poder que adquirimos es amor más discernimiento, es amor luminoso; ya no es amor ciego, el amor ciego puede ser un peligro mayor. De amor estamos enfermos, de amor se enfermó esta naturaleza, el amor sobreprotector, el amor condicionado, el amor condicional, el amor del mercenario: todas estas variedades de amor han creado nuestra cultura y nuestra civilización. Es decir, que “por amor”, como consecuencia de eso que llamamos amor, que son apegos y enamoramiento, estamos destruyendo el planeta.

Pero cuando accedemos a un amor pleno de luz, a un amor pleno de discernimiento, empezamos a controlar nuestras emociones y ascendemos al segundo piso de nuestro poder; al segundo nivel de nuestro poder, que es el control emocional, a eso lo llamamos, la Segunda Expansión de Conciencia, o la Segunda Iniciación. Ya estamos de este lado, ya no estamos del lado izquierdo en que descendíamos, ya empezamos a ascender a nuestro origen. Empezamos el Sendero de Retorno, el Sendero del Hijo Pródigo, el Sendero de Regreso a la Casa del Padre.

Descubrimos en ese poder emocional, el orden implícito, de un océano de sensibilidad. Ya no somos las olas, ya no estamos a merced del viento; ahora podemos profundizarnos en nuestro propio océano, para conquistar la serenidad, una condición sanadora que brota del alma.

SANAR LA VIDA Jorge Carvajal

CREDO DEL OPTIMISTA

Prométete a ti mismo: Ser tan fuerte que nada pueda turbar tu paz mental.

Hablar solo de salud, felicidad y prosperidad a toda persona que conozcas.

Hacer que todos tus amigos sientan que hay algo de valor dentro de ellos.

Mirar el lado bueno de todas las cosas y hacer que este optimismo se haga verdadero.

Sentirse tan entusiasta con el éxito de los demás como con el nuestro.

Olvidar los errores y penas del pasado y aferrarse a los grandes logros que alcanzaremos en el futuro.

Brindarle a cada criatura viviente que hallemos a nuestro paso una sonrisa.

Sentirnos demasiado fuerte para preocuparnos, demasiado nobles para encolerizarnos, demasiado seguros para temer y demasiado contentos para
pensar en dificultades.



(...perdon si molesto...)



La casa de los espejos

Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada.

Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logro meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa. El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al terminar de subir las escaleras se topo con una puerta semi-abierta; lentamente se metió en el cuarto.

Para su sorpresa, se dio cuenta que dentro de ese cuarto habían 1000 perritos mas observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos. El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco. Los 1000 perritos hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y le ladro alegremente a uno de ellos. El perrito se quedo sorprendido al ver que los 1000 perritos también le sonreían y ladraban alegremente con el!
Cuando el perrito salió del cuarto se quedo pensando para sí mismo:

"¡Que lugar tan agradable! Voy a venir mas seguido a visitarlo!"

Tiempo después, otro perrito callejero entro al mismo sitio y se encontró entrando al mismo cuarto. Pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros 1000 perritos del cuarto se sintió amenazado ya que lo estaban viendo de una manera agresiva.

Posteriormente empezó a gruñir; obviamente vio como los 1000 perritos le gruñían. Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros 1000 perritos le ladraron también a el. Cuando este perrito salió del cuarto pensó:

"¡Que lugar tan horrible es este! Nunca mas volveré a entrar allí!"

En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía: "La casa de los 1000 espejos".


Autor Anonimo

La sencilla moraleja de este cuento es que uno es, ni mas ni menos, lo que proyecta, lo que desea ser, lo que anhela ser.

La proyeccion de nuestras acciones en los demas nos dara satisfaccion o frustraciones. Lo que hagamos nos condenara a ver en los demas la alegria de sus rostros o la introspeccion de los que esperan una cosa y se sienten estafados al recibir otra.

Nuestro mundo es un mundo de espejos... vivamos su realidad con alegria para que siempre reflejemos en los otros las mismas cualidades que nosotros deseamos retener en nuestro entorno... solo de esa manera haremos realidad la tan trillada frase de "construir un mundo mejor"...

(...perdon si molesto...)

Las once reglas del exito

Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.

Regla Dos- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.

Regla Tres- No ganarás US$5.000 mensuales justo después de haber salido de la preparatoria y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros.

Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.

Regla Cinco- Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: le llamaban oportunidad.

Regla Seis- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.

Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.

Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.

Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.

Regla Diez- La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.

Regla Once- Sé amable con los "NERDS" (los más aplicados de tu clase). Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos.

Bill Gates

Si Bill lo dice... quien soy yo para molestar...???

(...perdon si molesto...)

La puerta

En una tierra en guerra había un rey que causaba espanto: A sus prisioneros, no los mataba, los llevaba a una sala donde había un grupo de arqueros de un lado y una puerta inmensa de hierro del otro, sobre la cual se veían grabadas figuras de calaveras cubiertas de sangre.

En esta sala les hacía formar un círculo y les decía: Ustedes pueden elegir entre morir a flechazos por mis arqueros o pasar por aquella puerta.......detrás de esa puerta YO LOS ESTARÉ ESPERANDO.........

Todos elegían ser muertos por los arqueros.

Al terminar la guerra un soldado que por mucho tiempo había servido al rey, se dirigió al soberano:

Señor ¿puedo hacerle una pregunta?

- Dime soldado

Señor: ¿que había detrás de la puerta? EL REY CONTESTÓ:

- Vé y mira tú mismo!!

El soldado abrió temerosamente la puerta y, a medida que lo hacía, rayos de sol entraron y la luz invadió el ambiente y finalmente, sorprendido descubrió que........

La puerta se abría sobre un camino que conducía a la LIBERTAD!!!!

El soldado embelesado miró a su rey, quién le dijo:

Yo les daba la oportunidad de hacer una ELECCIÓN, pero por temor preferían morir a arriesgarse a abrir esa puerta!!


Cuantas puertas dejamos de abrir por el miedo a arriesgar?

Cuantas veces perdemos la libertad y morimos por dentro, solamente por sentir miedo de abrir la puerta de nuestros sueños?

Cuantas puertas dejaste sin abrir solamente hoy, en este fragmento de dia, en este pedazo de tiempo en que viviste desde que despertaste?

Nunca pensaste que muchas veces VALE LA PENA EL RIESGO...?

Tras cada puerta hay un desafio. Tras cada despertar, todo un nuevo dia por emprender. Tras cada eleccion por mas nimia que parezca, una disyuntiva que tomar. La realidad es lo que construimos en base a nuestras acciones y nuestras elecciones. Simplemente es abrir las alas y desplegarlas al viento, viento que pasa a nuestro lado y nos acaricia el rostro como recordatorio fresco de nuestra profundidad en vivir y que tomamos en virtud de una sensacion pasajera de bienestar, y sin embargo es la prueba viva de que Dios existe y permanentemente nos da viento para nuestras alas.

Simplemente hay que desplegarlas y decidirnos a surcar el cielo de la vida... o cruzar una puerta, mas facil comparacion cotidiana...

Vale la pena el riesgo...

(...perdon si molesto...)

Aprender a volar

Un rey recibió como obsequio, dos pequeños halcones, y los entregó al maestro de cetrería para que los entrenara.

Pasando unos meses, el maestro le informó al rey que uno de los halcones estaba perfectamente pero que al otro no sabía que le sucedía, no se había movido de la rama donde lo dejó desde el día que llegó.

El rey mandó llamar a curanderos y sanadores para que vieran al halcón, pero nadie pudo hacer volar el ave. Encargó entonces la misión a miembros de la corte, pero nada sucedió.

Al día siguiente por la ventana, el monarca pudo observar, que el
ave aún continuaba inmóvil.

Entonces decidió comunicar a su pueblo que ofrecería una recompensa, a la persona que hiciera volar al halcón.

A la mañana siguiente, vio al halcón volando ágilmente por los jardines.

El rey le dijo a su corte, traedme al autor de ese milagro.

Su corte rápidamente le presento a un campesino.

El rey le preguntó:
¿Tú hiciste volar al halcón?, ¿Cómo lo hiciste?, ¿Eres mago?
Intimidado el campesino le dijo al rey :
Fácil mi rey, sólo corté la rama, y el halcón voló, se dio cuenta que tenía alas y se fue a volar.



Autor Anonimo

Tenemos sueños, queremos resultados, buscamos oportunidades, pero no siempre estamos dispuestos a correr riesgo, no siempre estamos dispuestos a transitar caminos difíciles. Nos conformamos con lo que tenemos, creemos que es lo único y posible, y aprendemos a vivir desde la resignación.

Arriesgarse es la consigna. Dejar de aferrarnos al pasado, a los paradigmas, a lo arcaico, a lo pasajero, a lo aparentemente seguro... pero, que es en realidad lo seguro?

La seguridad no puede sustentarse en cosas materiales ni pasajeras, en triunfos del ego ni del propio yo en pulseadas a la vida, en amarrarnos y salir a procurar luchar en un "gano yo, pierdes tu" cotidiano. La verdadera lucha es contra el desapego de los viejos esquemas, contra lo antiguo, lo pobre, lo vano, lo pasajero, lo engañosamente seguro como el naufrago que, por no perder lo que tenia, no arriesgo su playa, su entorno y jamas descubrio que al otro lado de su isla, la tierra continuaba hasta el continente...

No puedes descubrir nuevos mares... a menos que tengas el coraje para volar.

Pero nadie vendrá a rescatarte, nadie cortará tu rama.

Tú eres el mago.

(...perdon si molesto...)

El tesoro escondido

Érase una vez un anciano que había perdido a su esposa y vivía solo. Había trabajado duramente como sastre toda su vida, pero los infortunios lo habían dejado en bancarrota, y ahora era tan viejo que ya no podía trabajar.

Las manos le temblaban tanto que no podía enhebrar una aguja, y la visión se le había enturbiado demasiado para hacer una costura recta. Tenía tres hijos varones, pero los tres habían crecido y se habían casado, y estaban tan ocupados con su propia vida que sólo tenían tiempo para cenar con su padre una vez por semana.

El anciano estaba cada vez más débil, y los hijos lo visitaban cada vez menos.
— No quieren estar conmigo ahora -se decía- porque tienen miedo de que yo me convierta en una carga.
Se pasó una noche en vela pensando qué sería de él y al fin trazó un plan.

A la mañana siguiente fue a ver a su amigo el carpintero y le pidió que le fabricara un cofre grande. Luego fue a ver a su amigo el cerrajero y le pidió que le diera un cerrojo viejo. Por último fue a ver a su amigo el vidriero y le pidió todos los fragmentos de vidrio roto que tuviera.

El anciano se llevó el cofre a casa, lo llenó hasta el tope de vidrios rotos, le echó llave y lo puso bajo la mesa de la cocina. Cuando sus hijos fueron a cenar, lo tocaron con los pies.
— ¿Qué hay en ese cofre? preguntaron, mirando bajo la mesa.
— Oh, nada -respondió el anciano-, sólo algunas cosillas que he ahorrado.

Sus hijos lo empujaron y vieron que era muy pesado. Lo patearon y oyeron un tintineo.
— Debe estar lleno con el oro que ahorró a lo largo de los años -susurraron.

Deliberaron y comprendieron que debían custodiar el tesoro. Decidieron turnarse para vivir con el viejo, y así podrían cuidar también de él. La primera semana el hijo menor se mudó a la casa del padre, y lo cuidó y le cocinó. A la semana siguiente lo reemplazó el segundo hijo, y la semana siguiente acudió el mayor. Así siguieron por un tiempo.

Al fin el anciano padre enfermó y falleció. Los hijos le hicieron un bonito funeral, pues sabían que una fortuna los aguardaba bajo la mesa de la cocina, y podían costearse un gasto grande con el viejo. Cuando terminó la ceremonia, buscaron en toda la casa hasta encontrar la llave, y abrieron el cofre. Por cierto, lo encontraron lleno de vidrios rotos.
— ¿Qué triquiñuela infame! -exclamó el hijo mayor-. ¡Qué crueldad hacia sus hijos!
— Pero, ¿qué podía hacer? -preguntó tristemente el segundo hijo-. Seamos francos. De no haber sido por el cofre, lo habríamos descuidado hasta el final de sus días.

— Estoy avergonzado de mí mismo -sollozó el hijo menor-. Obligamos a nuestro padre a rebajarse al engaño, porque no observamos el mandamiento que él nos enseñó cuando éramos pequeños. Pero el hijo mayor volcó el cofre para asegurarse de que no hubiera ningún objeto valioso oculto entre los vidrios. Desparramó los vidrios en el suelo hasta vaciar el cofre.

Los tres hermanos miraron silenciosamente dentro, donde leyeron una inscripción que el padre les había dejado en el fondo: “Honrarás a tu padre y a tu madre”.

El cofre de vidrio roto / William J. Bennet


Benditos los hijos que aun conservan padres para honrar... y que deseen ser honrados...

Benditos los padres con hijos que los honren... aunque ellos no se den cuenta de ello...

Benditos los hijos que pueden dar honras a sus padres... no solo en la necesidad sino tambien en la alegria...

Benditos los padres que comparten su tiempo en dejarse honrar... y el merecimiento que siempre hagan para ello...

Benditos, padres e hijos, hijos y padres, porque nunca mas ninguno de los dos estaran nunca mas solos...


(...perdon si molesto...)

De vez en cuando la Vida...

Un día la vida tomo la figura de un joven apuesto y se puso a caminar por el mundo. A la orilla del bosque vio una cabaña, entro y encontró allí a un hombre pobre, enfermo de elefantiasis: todos sus miembros estaban hinchados y tan deformes que se movía con mucha dificultad.

¡Oh! ¿ Que venturosos vientos te trajeron a mi ?. ¿Quien eres tú?
Dijo el enfermo.

Soy la vida, respondió el caminante. Algunos me reconocen cuando llego, pero no cuando vuelvo. Yo voy y vengo,; volveré por estos lugares dentro de siete años.

¿Pero porque gimes tanto?

Tengo una enfermedad horrible; a destruido mi aspecto humano y me ha quitado la alegría de vivir. Ya no puedo mas.

Si quieres dijo la vida te curo. Pero tu me olvidaras.

¡No! Le aseguro el enfermo. Guardare eternamente en mi memoria a quien me cure y le estaré agradecido para siempre.

La vida esparció un polvo misterioso sobre el enfermo, y este quedo curado como por encanto. La vida siguió su camino y enseguida llego a la cabaña de un leproso.

Bendito tu que vienes a mi exclamo el leproso al ver al hermoso joven.

¿Puedo saber tu nombre?

Yo soy la vida, dijo el recién llegado. Algunos me reconocen cuando llego, pero no cuando regreso. Voy y vengo. Volveré por estos rumbos dentro de siete años. Puedo curarte ¿ pero te acordares de mi?.

No te olvidare mientras vivía dijo el leproso.

La vida lo curo y siguió su camino.

Al llegar a una aldea se encontró con un ciego que buscaba el camino con un bastón cuando oyó pasos, se detuvo y pregunto:

¿ Quien va? ¡ cuidado con este pobre ciego ¡

Yo soy la vida. Algunos me reconocen cuando llego, pero no cuando vuelvo. Cuando llego, curo también al ciego y desapareció.

Pasaron los años, y a su tiempo, como lo había prometido, volvió, pero esta vez oculto bajo la figura de un ciego. Era tan tarde cuando llego ala cabaña del ciego que había curado. Toco la puerta. No estaba, pero le abrió su esposa.

Tenga piedad de este pobre ciego dijo la vida. Conozco a su esposo ¿ me puede dar un refresco mientras lo espero? Me basta con un poco de agua.

Mi esposo es un verdadero tonto refunfuño la mujer. Trae a casa a cuanto pobre se encuentra. Puso un poco de agua sucia en una vieja jícara y se la ofreció de mal modo al falso fuego. Por fin llego el señor de la casa, y la vida se dirigió a el.

Estoy de paso dijo, ¿puedes darme alojamiento hasta mañana?

El hombre murmuro algo, después extendió una estera en la esquina de la cabaña y dio al ciego un puñado de cacahuetes.

Cuando despunto al alba, la vida llamo a su anfitrión y le dijo: ¿ no te dije que algunos conocen a la vida cuando viene pero no cuando regresa ? Tu no me has reconocido, porque la ceguera porque la ceguera se ha quedado en tu corazón y volverá también a tus ojos.Dijo esto y salió dejando tras de si una polvareda. El hombre volvió a ser ciego, como siete años antes.

Cuando la vida llego a la cabaña del antiguo leproso se cubrió de una lepra tan horrible que la seguían enjambres de moscas. Toco la puerta, pero aquel hombre, viendo al leproso no lo dejo entrar y rehusó darle de comer porque estaba demasiado sucio.

Te lo había dicho, le recordó el caminante, algunos conocen la vida

Cuando viene pero no cuando regresa dijo, y se marcho, dejando tras de si un reguero del misterio polvo. El hombre ingrato se cubrió de nuevo de tanta lepra que la carne se le caía a pedazos.

Cuando llego a la cabaña del antiguo enfermo de elefantiasis, la vida se hincho los miembros de tal modo que a duras penas podía caminar. Se asomo a la puerta y dijo: Buen hombre, un poco de refresco por caridad. Adelante Entra dijo el hombre, apresurándose a ayudar al fingido enfermo. O que desgracia. Tan joven y tan enfermo. Yo también, hace tiempo, tuve esa fea enfermedad, pero paso por aquí un buen hombre y me curo. Quizá..

Y mientras hablaba puso a cocer un plato de arroz, dijo el enfermo nueces y una jícara llena de leche fresca; después preparo un asado de carnero y se ocupo de cuidar al enfermo. En la mañana, la vida se presento como el joven hermoso que era i dijo: tu has reconocido a la vida también a su regreso. No olvidas los beneficios recibidos y sabes socorrer a quien sufre lo mismo que tu has sufrido. Por eso permanecerás sano y gozaras de prosperidad. El hombre quiso hacer un regalo a la vida, unas vacas. Pero el joven se lo agradeció diciendo:

No tengo necesidad de riquezas. Quiero que recuerdes una cosa importante: La vida puede cambiar y traer hoy bienes y mañana males, pero con frecuencia depende de ustedes hacerla mejor o peor.


Autor Anonimo

La vida nos ha entregado a muchos una oportunidad, debemos aprender a aprovechara, pero debemos siempre saber cuando se presente a cobrar, ser lo suficientemente agradecidos y pagarle eso que tenemos, que la propia vida nos dio.

Tratemos de poner lo mejor de nosotros siempre con todos . principalmente con la familia para que el día que no estemos aquí, dejemos recuerdos lindos y que nos extrañen con cariño.

(...perdon si molesto...)